viernes, 19 de septiembre de 2014

Marta Lucía Ramíirez, hoy

Tigresa Marta Lucía Ramírez, jefe natural del conservatismo, visita a Pereira

Augusto Mejía GonzálezFuente: www.eldiario.com.co

Marta Lucía Ramírez, Ómar Yepes Alzate, David Barguil, los parlamentarios de Risaralda: Samy Merheg, Diego Naranjo y César Franco y unos pocos más, salvaron en la reciente campaña presidencial, al partido Conservador, la colectividad más legendaria de América Latina, junto al P. Liberal.
Los dos millones de votos logrados por la Tigresa M.L.R. contra viento y marea; vale decir, contra la mermelada del Gobierno para hacerse reelegir, no importara el costo; que ahora trata de cubrir con la reforma tributaria; y a pesar de una dirigencia parlamentaria sin convicciones, ni honor, ni liderazgo, aupan aún más el salto logrado por la Tigresa; que queda en primera línea para la próxima Presidencia. Aunque la reelección presidencial ha sido muy traumática para el País, el Presidente Santos en lugar de haber propuesto un período presidencial de 5 años; de ninguna manera quería aparecer inferior a Uribe y creyéndose el único capaz de lograr las paz; le tolera a las Farc, toda clase de delirios.
La visita de la doctora M. L. Ramírez a Pereira es reconfortante, porque tiene como propósito prohijar un acercamiento entre la dirigencia y las bases; si es que la dirigencia quiere. Hace 6 años, por insinuación del desaparecido líder conservador Silvio Gallo Santa, tuvimos la oportunidad de sugerir a Samy Merheg como candidato al Senado por el Partido; y que el gran Juan Hurtado se quedara en Israel; y logramos ese Senado acéfalo por 20 años después de Emiliano.
Los heliotropos pusieron el grito en el cielo; porque según ellos, Samy provenía de Colombia Viva; a lo que nos tocó replicarles que Colombia Viva, ya estaba muerta; que el padre de los Merheg era un formidable patricio conservador; y un poco soberbio, Alberto Zuluaga, no volvió a escribir en este Diario del Otún. Propusimos también que para cautivar al conservatismo de Dosquebradas, deberíamos abrirle espacio a Ricardo Valencia; lo que nos permitió recuperar una segunda Cámara conservadora, después de 40 años; lo mismo hicimos con Mauricio Salazar, quien a pesar de los coqueteos de las demás colectividades, prefirió arroparse con la bandera azul de metileno.
Otra de las hazañas logradas por el conservatismo en Risaralda, es la extraordinaria votación obtenida por la colectividad en sus dos vertientes: el conservatismo puro y el Centro Democrático, con un gran total de 172.039 votos, discriminado así: por M.L.R: 74.401; por O.I.Z: 97.638; superándonos Caldas tan solo por 22,946 votos, no obstante duplicarnos en el número de municipios. Como nos hallamos todavía a un año de las elecciones para Gobernador, Alcaldías, Diputados y Concejales, respetuosamente queremos sugerirles al Senador Merheg y a los Representantes Juan Carlos Rivera y Mauricio Salazar, que aprendan a trabajar conjuntamente, sin egoísmos y en manada, como lo hacían los “Leopardos” políticos avezados que dejaron formidable huella.
La política no puede seguir ejerciéndose, como el comercio, a través de empresas particulares; porque los partidos son sustancialmente empresas colectivas en torno a un ideario. La pauta está dada: Álvaro Uribe, sacó la denominación de Centro Democrático del artículo 1° de los Estatutos del P. Conservador. Para la gobernación, ya hay 4 muy buenos precandidatos: Valencia, Salazar, Arias, Londoño; porque si Tamayo insiste en firmas, no irá a ningún Pereira. Para la Alcaldía, debemos escogerlo conjuntamente entre el C.D y el P.C y al P. Liberal y demás colectividades, les daremos la participación adecuada y equitativa que ellos nos han dado. Pero la dirigencia no nos puede decir a la base: ¡Nosotros ya escogimos; sin Ustedes!
augustomejiag@gmail.com