Por Francisco Mario Velásquez A.
El domingo 29 de octubre se celebraron las elecciones regionales en Colombia, y como muchos colombianos, yo también fui a votar. Vivo en Envigado, y viajé a Medellín, como en anteriores votaciones lo he hecho. En este artículo, les cuento mi experiencia en la mesa tres de la Institución Educativa Lucrecio Jaramillo Vélez.
Llegué al colegio aproximadamente a las 8:45 de la mañana. No hubo requisa a la entrada, y en mi mesa éramos unas veinte personas en la fila. Primero pasé por el registro biométrico, un nuevo requisito electoral para poder votar. Luego uno de los jurados buscó mi nombre y firmé al lado, luego me tomaron la huella dactilar y me entregaron los tarjetones.
En nuestra mesa, dos personas jóvenes estaban votando. Alguien preguntó si esto era una anomalía, pero nos dijeron que la Registraduría está entregando cédulas que comenzaban con el número 8 millones que corresponde a personas personas muy mayores. No hubo mayor discusión.
El proceso fue lento y duró casi una hora para que depositara las papeletas. El colegio se encontraba muy concurrido y la gente estaba alegre. No escuché comentarios sobre los candidatos, solo decían que era preferible marcar el voto preferente por el partido.
Lamenté no encontrar en las filas a mis viejos amigos del barrio, ni de mi pueblo en otras elecciones coincidí con muchos y departíamos de política.
Lo que espero de los elegidos, tanto para gobernador de Antioquia como alcalde de Medellín, hagan todo lo que esté a su alcance que resuelvan los graves problemas de inseguridad. La pobreza causa mucha desigualdad social, y eso lleva a mucha gente a la desesperación, a actuar contra la ley y cometer toda clase de tropelías.
También espero que el nuevo alcalde Federico Gutiérrez trabaje para que Medellín sea más aseada y porque las vías estén libres de congestiones. Que busque la manera para que los jóvenes tengan oportunidades de estudio y de trabajo y para que la atención en los puestos de salud sea pronta y de calidad. Todos queremos que el costo de los servicios públicos sea razonable y esto se haga posible.
En resumen, mi experiencia de votación fue positiva. El proceso fue lento, pero la gente estaba amable y dispuesta a ayudar. Espero que los nuevos gobernantes, repito, resuelvan los graves problemas de inseguridad y que trabajen para mejorar la calidad de vida de todos los colombianos.
Exhorto a todos los colombianos a que se involucren en la política y que exijan a los nuevos gobernantes cero corrupción y que cumplan sus promesas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario